Mientras
observaba el paisaje, alababa a Dios por su bella obra, y allí sentado, sentí
la presencia del Señor que me preguntó, ¿Me amas? Yo contesté, ¡Por supuesto, Dios! ¡Tú eres mi
Señor y Salvador!
Entonces
me preguntó, Si estuvieras físicamente incapacitado, ¿aún me amarías? Me
quedé sorprendido, bajé la mirada, me quedé unos minutos en silencio. Y
contesté: Sería
difícil, Señor, pero aún así te amaría.
Entonces
el Señor dijo: Si estuvieras ciego, ¿amarías mi creación?.¡Cómo podría amar
algo, sin poder verlo! Y entonces pensé en las personas ciegas que aman a Dios
y a su Creación. Así que
contesté: Es
difícil, pero si aún te amaría.
El
Señor entonces me preguntó: Si fueses sordo, ¿oirías mi Palabra?. ¿Cómo podría oír algo siendo sordo? Entonces comprendí. Escuchar la Palabra de Dios no es solamente usar nuestros oídos, sino nuestros
corazones. Contesté: Sería difícil, pero aún oiría tu Palabra.
Andrea
Carrillo en http://www.renuevodeplenitud. com/
Blog Pastillitas
No hay comentarios:
Publicar un comentario