La vida es para gente luchadora, para aquellos que al perder una batalla siguen luchando porque saben que la vida continua con nuevas oportunidades y siempre habrá posibilidades de levantarse y seguir adelante. Te invito para que examines tu vida con ojos de fe y descubras como Dios ha intervenido en tu historia, como él va guiando tus pasos con amor, sin apartarse de ti un solo momento. No puedes ser de aquellos que viven sin sueños y esperanzas de salir adelante, sino un guerrero que se limpia las lagrimas de los ojos para ver mejor en el horizonte las posibilidades que tiene por delante.
Pídele fuerza y valentía al Señor. Que tu oración sea siempre: "Señor, quiero ser fuerte para amar y seguir tu voluntad.
Adaptado de El Man está Vivo (1/3/12)
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