Los días del 2013 serán iguales a los del 2012 a menos que
tu cambies de actitud. Para ello te recomiendo:
1. Desapego. Desapegarse, liberarse de todo aquello que no te
deja correr. Hay personas, situaciones, sentimientos, proyectos a las que hay
que decirles ya no más. Uno necesita vivir libre. Aunque un ancla es mucho más
pequeña que el buque, el ancla le impide al buque moverse a menos que se libere
de ella. Hay personas y situaciones pequeñas que no te dejan crecer; quítatelas de encima, libérate.
2. Soñar, ser optimista. La vida se hace con sueños, se hace
creyendo. Lo importante es volver a soñar. Soñar es gratis y tienes derecho a
hacerlo, no importa la edad que tengas. Si sueñas poquito vas a lograr poquito,
si sueñas en grande vas a lograr mucho. Muchos de nosotros nos quedamos en una
zona de comodidad y no adquirimos nuevos retos y por lo tanto no tenemos
grandes conquistas. Lánzate, arriésgate.
3. Resiliencia. Alguien que es capaz de sobreponerse a una
adversidad es una persona resiliente. Adversidades hay todos los días. No vayas
a creer que todo te va a salir bien este año. Habrá adversidades, habrá
conflictos, lo normal es que te pasen cosas malas, que haya enfermedades, que
tus hijos quieran hacer cosas que no te parezcan. Lo que tienes que pedir es
capacidad de aguante, capacidad de resiliencia. No pidas que no haya líos, pide
que los que haya tú los puedas enfrenar y resolver. Señor dame tu fuerza e impúlsame
a seguir adelante.
4. Alegría. Cuando el ángel se aparece a María lo primero
que le dice es “alégrate”. Uno tiene que hacer lo que tiene que hacer con
alegría. Pero no la alegría pasajera o la euforia que da el licor o un ritmo de salsa que
es pasajera, sino la alegría que da la presencia del Señor. Alégrate, la vida
se construye con alegría.
Caracol TV Linero 060113
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