Los seres humanos pocas veces nos detenemos a reflexionar acerca de cómo comportarnos ante las adversidades que se nos presentan en la vida. A veces nos convertimos en expertos en complicar estas situaciones, no en resolverlas. Convierte las adversidades en oportunidades, tómalas como retos a resolver y tareas de aprendizaje. No las hagas más complicadas de lo que realmente son, sino búscales soluciones. Eso requiere que te llenes de calma y no caigas en el desespero al que a veces nos llevan las situaciones adversas, a que mires a tu alrededor, estudies, investigues las posibles salidas y ponlas en práctica.
Esta reflexión quiere llevarte a un cambio de actitud ante la realidad de los problemas que encuentras a diario. Estás dotado de las capacidades necesarias para resolver estas situaciones. Ten fe en Dios e impulsado por esa fe cree en ti mismo, en que cuentas con las herramientas necesarias para resolver las situaciones adversas que se te presentan en la vida. Dios está contigo, eres hechura de sus manos, Él te ha dotado de lo necesario para salir adelante.
Padre Alberto Linero
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